No se de que color era el sueño americano de Martin Luther King pero el mío era naranja ("orange internacional" para ser exactos) y justo ahora se acaba de cumplir. Solo han pasado 3 meses desde que empecé mi "pursuit of happiness" pero han sido muchas las noches y trasnoches que he soñado despertar ante el Golden Gate de San Francisco. A partir de ahora deberé seguir muy despierto para hacer frente a todo lo que me espera al otro lado del puente pero por unos instantes quiero disfrutar de esta enorme sensación de libertad. Si, ya se, suena muy yankee pero que voy a decir chaval si me siento asínnnn de LIBRE. Libre y Feliz.